Hoy te traigo una deliciosa calzone, con extra de queso y verduritas porque en este caso es vegetal, pero ya sabes que admite mil y un rellenos.
Lo que más me gusta de las calzone es esa cantidad de queso tan alucinante, que la abres y se desparrama… ¡Para mí es lo más! Si te gusta mucho el queso seguro que me entiendes 😉
Me encantan las pizzas, las hacemos de lo más variopintas y tienes algunas deliciosas ya publicadas como ésta que lleva pesto, pollo y queso ricotta y la hace algo diferente 😉
La salsa de tomate es una parte fundamental en las pizzas, yo uso esta de la marca Ibsa y va fenomenal, no moja la masa sino que se integra perfectamente con ella.
Vamos con la receta, además te cuento cómo hago para que la mozzarella suelte menos agua y no nos estropee la calzone.
INGREDIENTES:
Una base de pizza
Tomate frito Ibsa
Media berenjena
Medio pimiento rojo
Medio pimiento verde
Una bola de queso mozzarella
100 gr de queso Edam rallado
Orégano
PASO A PASO:
Precalentamos el horno a 240º
Secamos la mozzarella bien con un papel absorbente, la desgajamos o rompemos en trozos no muy pequeños y la volvemos a secar con papel absorbente
Extendemos la masa de pizza sobre una bandeja de horno, si tuviésemos una superficie de piedra ya sería lo más 😉
Extendemos 3 o 4 cucharadas de tomate sobre toda la superficie dejando los bordes limpios para poder cerrarla después
Añadimos a sólo una mitad de la pizza (como véis en la imagen) los quesos, las verduras cortadas en trozos pequeños y espolvoreamos orégano, cerramos bien con los dedos
Horneamos 15 minutos y ¡lista para devorar!
¡NOS VEMOS EN LA PRÓXIMA RECETA!
